Ante creciente demanda de alimentos de origen animal, se trazan vías para reducir las emisiones del sector ganadero
“El informe presenta estimaciones de las emisiones futuras”
Es imperativo trazar vías para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) producidas por los sistemas ganaderos del mundo teniendo en cuenta la creciente población mundial y el 20 % de aumento previsto de la demanda de productos terrestres de origen animal de aquí a 2050.
El informe titulado Vías para reducir las emisiones: una evaluación mundial de las emisiones de gases de efecto invernadero y las opciones de mitigación en los sistemas agroalimentarios ganaderos), presentado en paralelo a la cumbre sobre el clima, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP 28), abre un abanico de oportunidades para los encargados de formular políticas, las partes interesadas de la industria, los pequeños productores y los consumidores.
“Además de evaluar las emisiones de referencia, este informe presenta estimaciones de las emisiones futuras en hipótesis de aumento de la producción, y esboza vías para reducir las emisiones mediante la aplicación de buenas prácticas, ya consolidadas, en la gestión de los animales. Demuestra con claridad que los programas ambiciosos e innovadores y diversos tipos de intervenciones pueden contribuir a aplanar la curva de las emisiones al tiempo que se aumenta la producción”, aseguró la Sra. Maria Helena Semedo, directora general adjunta de la FAO.
“Soluciones como la mejora de la sanidad animal y las prácticas de cría, la reducción de la pérdida y el desperdicio de alimentos y la focalización directa en las emisiones de GEI pueden proporcionar múltiples beneficios para las personas y el planeta; sin embargo, requieren inversiones en el sector con miras a reducir las lagunas de eficiencia, al mismo tiempo que se satisface una mayor demanda mundial de proteínas de origen animal”, añadió, señalando que las intervenciones deben ser específicas para cada lugar y facilitar el acceso de los productores a financiación y servicios para que puedan poner en práctica intervenciones adaptadas.
El informe, sometido a un proceso de revisión por pares de doble anonimato en el que participaron expertos de todo el mundo, esboza varias vías que afectan tanto al lado de la oferta como al lado de la demanda de los sectores ganaderos y que, si se adoptan colectivamente, podrían ayudar a hacer frente a las repercusiones ambientales y a promover la sostenibilidad. Aunque no existe una solución universal y es necesario seguir trabajando para comprender los obstáculos para la puesta en práctica y ampliación de estas intervenciones, la mejora de la productividad y la eficiencia de la producción en toda la cadena de valor es la forma más prometedora de mitigar y reducir las emisiones del sector ganadero.