Cómo Producir Tomates en Huertos Caseros

Por Prof. Julio C. Cedeño R.     

 Introducción

Cuando vamos a un supermercado y vemos los anaqueles llenos de tomate, observamos los precios y nos decimos con cierto grado de inconciencia: “que caro está el tomate”, pero sin percatarnos que para producir este tipo de rubro, hay que tener mucho capital invertido en la actividad ya que, los costos de producción de tomate a veces supera los tres mil dólares, y que muchas veces, los gastos no se recuperan. Es por eso y mucho más que debemos conocer la actividad que se menciona en el título de este documente y así poder entender a cerca de la “producción de tomates en huertos caseros”.

 ¿Qué es el tomate?

¿Es una fruta? ¿Una hortaliza? ¿Una verdura? Es el tipo de preguntas que nos formulamos cada vez que hablamos de la misma. En realidad es una fruta, es la parte de la planta que contiene las semillas. Por tanto, botánicamente hablando, el tomate es una fruta a pesar de que no se suela servir en el postre.

 La confusión viene de que en el siglo XIX, esta controversia popular llegó a la Corte Suprema de Estados Unidos. En 1887, se aprobó una ley que asignaba impuestos a las hortalizas importadas, pero no a las frutas. Las compañías que importaban tomates argumentaron que estaban exentas del impuesto, ya que el tomate es una fruta. Para dar rigor a su argumento, citaron diccionarios y testimonios de biólogos que evidentemente, demostraron que el tomate, al ser producto del ovario de una flor, es una fruta.

 ¿Qué tipos de tomates sembramos en nuestros huertos? 

Hay dos tipos de tomates, los de tipo híbrido y los de tipo variedad. Los híbridos son de crecimiento indeterminado (plantas que crecen sin determinar la altura y la cobertura de las mismas) y las variedades son de tipo determinado (plantas que crecen hasta cierto límite y se detienen). A los tomates híbridos hay que eliminarles los chupones o retoños basales para evitar el uso innecesario de energía, debido a que estos extraen gran cantidad de esta.

 ¿Qué tipo de suelo exige el cultivo de tomates?

Se considera que un suelo ideal debe tener las siguientes condiciones: 45% de minerales, 5% de materia orgánica, 25% de agua y 25% de aire o espacio poroso. El tipo y la cantidad relativa de minerales, más los constituyentes orgánicos del suelo, determinan las propiedades químicas del suelo.

 Los suelos aptos para cultivar tomate son los de media a mucha fertilidad, profundos y bien drenados, pudiendo ser franco-arenosos, arcillo-arenosos y orgánicos. El pH del suelo tiene que estar dentro de un rango de 5.9 - 6.5, para tener el mejor aprovechamiento de los fertilizantes que se apliquen.

 Contar con un buen análisis de suelos antes de la siembra, es una condición indispensable para poder manejar un plan de fertilización adecuado a los rendimientos esperados; además, nos sirve para hacer alguna enmienda en el suelo, es decir, hacer las aplicaciones de cal o materia orgánica necesaria para tener las condiciones requeridas para un desarrollo normal del cultivo.

 ¿Cómo plantamos el tomate en un huerto casero?

Para plantar tomates en un huerto casero hay que elegir un área donde el sol penetre en la mañana y en la tarde, que tenga barreras naturales contra el viento y que este bien cercado para evitar la invasión de animales domésticos y seres humanos, especialmente niños y que no perturbe a los vecinos o a los que habitan la casa donde está el huerto.

 Para desarrollar un proyecto de tomate a nivel casero hay que hacer un semillero, el cual va a tomar unos 12 días desde el momento que se depositan las semillas a las bandejas plásticas o en el suelo, hasta que se depositan en la parcela del huerto, éste deberá ser fertilizado y depurado de enfermedades y plagas antes de sembrarse para obtener mejores resultados.

 Tenemos también que introducir un sistema de riego que le suministre a las plantas un litro de agua por hora como mínimo, tiempo de riego el cual será activado cuatro veces por semana en la época seca y durante la época lluviosa se activa solamente cuando no hay presencia de lluvias.

 ¿Cómo plantar tomates en macetas?

Primero, conseguir tierra de aluvión u otra tierra de buena textura de la misma, se aplica un 80 a 85% dentro de un saco, un 10% de cascarilla de arroz quemada si es posible y 5% de materia abono orgánico, se debe preparar un quintal (100 lb) de este compuesto. Una vez en las macetas o potes, se le vierte agua caliente para eliminar bacterias, hongos y otros agentes patógenos presentes, dejarla reposar un día y luego se procede a sembrar.

 ¿Cuándo y cómo cosechar el tomate?

El tomate tiene un periodo de cosecha que va desde el día de germinación en los semilleros hasta su maduración de unos 75 a 80 días, dependiendo de las condiciones en que el cultivo se ha desarrollado, y dependiendo también del grado de madurez que el agricultor lo coseche, ya sea a ¾ de madurez o madurez completa.

 Para colectar los tomates se debe contar con una cubeta plástica, una tijera y un atomizador con una solución de cuatro centímetros cúbicos (4cc) de fosfito de potasio por un litro de agua, una vez se cortan los pedúnculos del fruto se procede a curar el área de donde se cosechó el tomate.

 ¿Cómo tutorar la planta de tomate?

Hay varias formas de tutorar una planta de tomate, esto se hace para evitar el contacto de los frutos directamente con el suelo y de esta evitar el contagio de enfermedades y ataques de insectos de suelo.

 ¿Cómo se puede almacenar y consumir el tomate?

Una vez cosechado el fruto de tomate, hay que preparar una solución de cloro de un centímetro cúbico por un litro de agua para curar cualquier tipo de parásito o materia extraña que éstos tengan. Luego se secan con un paño seco y se guardan a una temperatura ambiente si no están muy maduros, y si lo están se ponen en el frío, se pueden consumir en ensaladas frescos, en forma de refritos, o si bien se pueden preparar salsas para comer con tortillas. Para preparar este último, se pone agua a hervir, y cuando ya está caliente, a los tomates se les hace un corte fino en cruz en la parte de abajo, se sostienen con un tenedor por el pedúnculo y se meten en el agua sin apagarla para que se depilen fácilmente, ya que las cascaras no son muy beneficiosas para la salud, especialmente si se sufre de divertículos. Una vez depilados, se abren y se le sacan solamente las semillas con su placenta y se parten en trozos para luego ser cocidos con ajíes, cebolla y especias o hierbas finas.

 Fuentes

http://www.quo.es/naturaleza/el-tomate-es-una-fruta-una-hortaliza-una-verdura

 www.alimentacion.enfasis.com/articulos/65722-componentes-calidad-el-tomate

 http://es.wikipedia.org/wiki/licopeno

 Referencias del autor

Julio César Cedeño Rodríguez, Chippewa Valley Tech College, U.S.A, Técnico en Ciencias Agrícolas. Idoneidad 7,921-15, Universidad Nacional de Panamá, sede de Azuero, Licenciado en Humanidades Especialidad Docencia Media Diversificada e Investigaciones, Universidad Nacional de Panamá, sede de Azuero, Coordinación Agrícola, Ministerio de Desarrollo Agropecuario